La tos de las perreras es una enfermedad respiratoria que afecta a los perros. Se caracteriza por una inflamación de la traquea y de los bronquios. Es muy contagiosa y está provocada por una combinación de varios agentes infecciosos, la bacteria Bordetella bronchiseptica , el virus de la parainfluenza canina y el adenovirus canino 2. Los perros afectados manifiestan una tos seca y persistente y pueden llegar a eliminar secreciones espumosas.

La tos de las perreras es una enfermedad que no afecta a las personas. Suele compararse con la gripe humana por la sintomatología y por la forma de transmisión, ya que se contagia a través del aire o bien por contacto directo.

Lo más probable es que se contagie en aquellos lugares donde exista una mayor concentración de perros como sucede en criaderos, tiendas de animales, residencias caninas, exhibiciones e incluso parques.

Los cambios bruscos de temperatura, humedad o el estrés son también factores que predisponen a los animales a padecer la enfermedad, ya que su sistema inmunitario se ve afectado y esto hace más fácil el contagio.

Los casos más leves pueden no necesitar tratamiento, pero en general es recomendable tratarlos para aliviar los síntomas y evitar complicaciones, especialmente en animales viejos y cachorros.

Para prevenir la enfermedad se recomienda la vacunación, sobre todo antes de dejarlos en residencias caninas o acudir a exhibiciones o concursos, también en animales mayores o con patologías respiratorias o cardíacas y en todos los animales en cualquier época del año, pero preferiblemente antes de que empiece el invierno.